Publicidad
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
Publicidad
Publicidad
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
"Papá, quiero un chándal de Nadal"
Publicidad
Tony les hizo pensar a sus padres que se había tatuado el cuello entero. Tal fue el disgusto que se llevó su madre, que se echó a llorar.
Vive en la misma casa con su marido y sus hijos desde hace 20 años y, aunque la han convertido en un hogar, en solo 2 semanas les va a desahuciar su propia familia.