Publicidad

INTENTAN LOCALIZAR EL CADÁVER DEL EMPRESARIO

El secuestrador de Publio Cordón se somete al test de la verdad

Por tercera vez la justicia española confía en la llamada 'prueba de la P300' para cerrar un caso policial. Y, en esta ocasión, no es un caso más. Se trata de averiguar dónde está el cuerpo de Publio Cordón, el empresario secuestrado y asesinado por los Grapo en los años 90. Al terrorista Silva Sande le mostrarán lugares en los que pudo haber enterrado el cuerpo y será el análisis de la reacción de su cerebro el que de pistas sobre su paradero.

Se rastrea el cerebro en busca de una onda que no miente. La prueba P-300 -conocida como el test de la verdad- explora la información que guarda la  memoria y busca respuestas.

Silva Sande se somete a este examen con un objetivo: encontrar el cadáver de Publio Cordón. Está condenado a más de 20 años por la desaparición del empresario secuestrado por los grapo en 1995 en Zaragoza: en esa época Silva Sande era el jefe  militar de la banda.

Hace siete años se arrepintió y reveló a la policía que Publio Cordón había muerto al caer por una ventana cuando intentaba escapar de sus captores. Al empresario lo enterraron -dijo- en el sureste de Francia.

Colaboró en la búsqueda de los restos sin éxito. Ahora le colocarán este casco con sensores. Se sentará frente a una pantalla, y le mostrarán imágenes sobre los lugares donde pudo enterrar el cuerpo.

Las ondas que marquen su cerebro son la respuesta,  tiene que estar tranquilo y a oscuras para focalizar bien la imagen, es una prueba voluntaria.

Este test se complementa con la prueba N400, una especie de máquina de la verdad. El coste corre a cargo de la familia de Publio Cordón

Es la misma prueba que se le hizo a Miguel Carcaño -asesino confeso de Marta del Castillo- para tratar de localizar el cadáver de la menor y también a Antonio Losilla, presunto asesino de su mujer.

En ningún caso se han encontrado los cuerpos.

Publicidad