Locuras urbanísticas

Locuras urbanísticas llevadas al extremo: coches circulan por el tejado de las casas

En el mundo del urbanismo hay verdaderos proyectos surrealistas para enmarcar.

Publicidad

En ocasiones el urbanismo y las obras avanzan, a costa de lo que sea. Por ello, nacen construcciones realmente extrañas y surrealistas que muchas veces hay que ver para creer. Es el caso, por ejemplo, del cementerio de Villanueva de la Cañada, en Madrid. Se quedó en medio de una rotonda. Otro caso extremo que es una locura muy llamativa hace que coches circulen por los tejados de las casas, sí, por encima de ellas. Ocurre en Tenerife.

En la isla canaria se construyó una carretera encima de las viviendas pese a que los coches tuvieran que cruzar por encima de ellas. El equipo de Antena 3 Noticias se ha desplazado hasta Tenerife para analizar este urbanismo extremo desde todos los puntos y preguntar a los vecinos, que aseguran "que han aprovechado el espacio".

Una vecina exclamaba que ella no "ve otro sitio por donde puedan pasar la carretera". Cuesta creer que se pueda mantener una conversación tranquila en los balcones de las viviendas bajo la carretera por el estruendo del tráfico. Muchos vecinos indicaban que no hay problema, que está "todo perfecto". Están encantados: "No se oye ni cuando baja la guagua ni nada, es una tranquilidad total".

La idea, fuera de la urbanización no convence demasiado. "Tenemos la preocupación de que un día se venga abajo la carretera", decía una vecina de la isla canaria.

Ejemplos del urbanismo más extremo

En medio de Oviedo se encuentra el Centollo de Calatrava, con el espacio muy justo. Habitantes de la ciudad asturiana dicen que "será muy moderno, pero vamos, no lo veo". Otro ejemplo claro de las locuras que se pueden ver en el mundo del urbanismo, lo recordarán, el tobogán de Estepona.

Fuera de España también hay proyectos para enmarcar, como un tren en China que atraviesa un edificio de 19 pisos. Mostramos el proyecto a nuestros ciudadanos y no dan crédito: "¡En mitad de un edificio!" "Aquí si que tienen que tambalearse todas las ventanas, las puertas y todo". Menos vueltas le tuvieron que dar a una construcción de una autopista en Egipto. Se levantó a menos de medio metro de los balcones de los vecinos.

Publicidad