Las madres lactantes que han contraído el coronavirus no lo transmiten a sus bebés a través de su leche, pero sí transfieren anticuerpos capaces de neutralizar el virus que provoca la COVID-19, según un estudio elaborado por la Universidad de Idaho (Estados Unidos).
Los científicos analizaron casi dos tercios de la leche generada por las madres para concluir que todas contenían anticuerpos y ni un solo virus. No obstante, sí detectaron un resultado positivo concluyente en uno de los bebés. Eso sí, entre el 76% y el 80% de las muestras analizadas contenían anticuerpos frente a la COVID-19. Y de ellas, el 62% mostraron la capacidad de neutralizar al coronavirus.
La leche materna neutraliza al virus
Los investigadores analizaron la leche de 18 madres que se habían infectado de COVID-19, de las que solo dos fueron asintomáticas. El análisis se llevó a cabo unos siete meses después del parto. La mayoría de los lactantes (el 83%) no manifestaron síntomas de la enfermedad y todos los que lo presentaban los redujeron al final del estudio.
Los resultados fueron prometedores: 21 de las 34 muestras de leches recolectadas de pacientes de coronavirus fueron capaces de impedir que el coronavirus afectase a sus bebés.
Por tanto, los científicos concluyen que la detección del ARN del coronavirus en la leche producida por madres con la enfermedad y que presentan un cuadro clínico leve o moderado contiene anticuerpos, lo que relacionan directamente con su capacidad neutralizadora.
Por último, los investigadores recomiendan que si una mujer infectada o con sospecha de haber contraído la enfermedad tose sobre su pecho, debe lavárselo antes de amamantar para evitar el riesgo de contagio. La recomendación sigue con lo estipulado por la Organización Mundial de la Salud, que aconseja no interrumpir la lactancia directa en caso de infección.
Según datos del Ministerio de Sanidad, un total de 40 bebés se habían contagiado de coronavirus en su primer mes de vida en agosto de 2020.
