Bella Hadid se ha visto envuelta en medio de la polémica por
culpar del 'Fyre Festival', en cuya promoción participó la modelo junto a otros
rostros tan conocidos como los de Hailey Baldwin, Emily Ratajkowki o Alessandra
Ambrosio. El evento prometía ser un Coachella pero a niveles más lujosos,
aunque todo resultó ser un fiasco.
Las entradas tenían un altísimo precio, algunas incluso
superaban los 13.000 dólares, y se celebraba en una playa privada de arena
blanca que, según la propia organización, perteneció a Pablo Escobar. En el
anuncio se podían ver motos de agua, veleros y aseguraban que majestuosos
alojamientos, pero nada fue verdad.
Cuando los asistentes llegaron se encontraron con tiendas de
campaña blancas y con una oferta gastronómica que se reducía a pan integral con
un par de lonchas de queso, dos hojas de lechuga y una rodaja de tomate. De ahí
que las quejas durante lo que parecía que iba a ser un fin de semana
inolvidable inundaran las redes sociales por el timo que en realidad se
encontraron.
Esto obligó a que la organización pidiera disculpas diciendo
que “las circunstancias escaparon de nuestro control” y se escudaron en que
tuvieron falta de tiempo para preparar la infraestructura que se esperaba. Esto
ha llevado a que el rapero Ja Rule e, incluso, la propia Bella hayan tenido que
pedir disculpas a través de sus redes sociales.
“Aunque este nunca ha sido mi proyecto y no fui informada ni
de la producción ni del proceso del festival, sé que siempre fue su intención
el hacernos pasar el fin de semana de nuestras vidas. Confié en que iba a ser
una experiencia increíble e inolvidable y por eso acepté hacer la promoción…
Sin saber el desastre que estaba por llegar. Lo siento muchísimo porque esto es
algo que no puedo tolerar, aunque por supuesto si hubiese sabido cuál iba a ser
el resultado, vosotros lo habriáis sabido también. Espero que todo el mundo
esté a salvo y pueda volver a casa con sus familias y seres queridos”, escribía
la top.
Los organizadores aseguran que, tras las miles de críticas,
reembolsarán a los asistentes gran parte del dinero que habían pagado. Pero se
teme que este tipo de cosas sigan ocurriendo porque los ‘influencers’
encargados de promocionar este tipo de cosas no las supervisen para que todo
sea tal y como se describe en el
anuncio.