Alfonso y Emilia le piden a Adolfina que se vaya. Mientras ella, negando la realidad, ha hecho planes que Alfonso rechaza de lleno.
Tristán y Pepa están arruinados, y por mucho que ella se oponga, se verán obligados a cerrar el comedor social. Tristán pide responsabilidades. El pastor jura que él no hizo nada malo. Sin querer, da una pista. Una prostituta trae información útil para Pepa. Pepa da a Tristán la pista definitiva de que fue Olmo quien contaminó sus tierras. Pistola en mano, Tristán pide explicaciones a Olmo y a Francisca.