Pastel de espárragos blancos con crujiente de queso, de Arguiñano: "¡Solo triturar y al horno!"

Karlos Arguiñano ha elaborado la receta que le pedía María Dolores de la Comunidad de Cocina. Una receta muy fácil de elaborar y que requiere muy poco trabajo, puesto que con triturar los ingredientes y meterlo en el horno, ya lo tendrás listo.

Ingredientes, para 6 personas

4 huevos

700 g de espárragos blancos en conserva (escurridos)

1 ½ l de leche evaporada

75 g de queso rallado en polvo

150 g de queso rallado en tiras (para gratinar)

50 g de canónigos (limpios)

12 tomates cherry

Aceite de oliva virgen extra

vinagre

sal

mantequilla y harina para el molde

perejil

Elaboración

Coloca los huevos en el vaso americano y añade el queso en polvo y la leche. Empieza a triturar y vete incorporando los espárragos de uno en uno. Sigue triturando hasta conseguir una crema homogénea.

Unta un molde (tipo cake) con mantequilla y espolvoréalo con un poco de harina. Extiende una tira de papel de horno a lo largo del molde de manera que sobresalga una pestaña por cada lado. Vierte dentro la crema de espárragos y hornea el pastel al baño María a 180º durante 45-60 minutos. Retíralo y espera a que se enfríe (también se puede comer templado). Pasa los bordes del pastel con un cuchillo, tira de las pestañas de papel y desmóldalo.

Cubre una bandeja de horno con un trozo grande de papel sulfurizado. Divide el queso en 6 y coloca 6 montoncitos sobre la bandeja (sin que se toquen entre sí), cúbrelos con otro trozo de papel de horno, y hornéalos a 180º durante 15 minutos. Retira los crujientes del horno y deja que se enfríen.

Corta el pastel en porciones y sirve. Coloca en cada plato unas hojas de canónigo y unos tomates cherry cortados por la mitad. Adereza las ensaladas con aceite, vinagre y sal (al gusto). Decora los platos con los crujientes de queso y unas hojas de perejil.

Consejo

Si queréis que los crujientes de queso queden aún más crujientes, podéis agregar un poco de pan rallado al queso. Y que sepáis que también se pueden aromatizar añadiendo especias o hierbas aromáticas.