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CUATRO AÑOS EN PARO
De voluntario a recibir ayuda de la Cruz Roja
Julio Cayuela es voluntario de Cruz Roja desde hace 32 años. Ahora, sin trabajo ni prestación, y con su piso embargado, la Cruz Roja es la que le proporciona comida. Necesita un trabajo desesperadamente porque tampoco puede pagar él su hipoteca.
Nunca pensó que algún día la Cruz Roja tuviera que ayudarle a él. Julio ha sido voluntario de esta organización desde hace 32 años, pero desde hace 3 meses ha solicitado su cuando agotó todas sus posibilidades.
Julio, de 50 años, era responsable del departamento de recursos humanos de una empresa. Le despidieron hace 4 años y no recibe ningún tipo de prestación. Está divorciado y hace ya mucho que no puede pagar la pensión por sus hijos que ahora mismo tienen 17 y 20 años. Cruz Roja le da alimentos y le paga el abono transporte para que pueda seguir buscando trabajo.
Julio vive en una casa en la localidad madrileña de Pinto y tenía otro piso en alquiler que heredó. Su mujer le denunció por no pagar la pensión y por ello le han embargado el piso que tenía alquilado. Ha intentado venderlo pero en cuanto le dice a los posibles compradores que un embargo pesa sobre la vivienda, se echan para atrás.
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