Antonio Meño lleva 21 años en coma vigil. Entró en el quirófano para hacerse una simple rinoplastia, pero salió en coma vigil irreversible. Una negligencia médica estaba detrás, pero los tribunales no lo han reconocido hasta ahora. La familia, condenada a pagar las costas del juicio, y deshauciada de su casa, lleva 21 años luchando porque se haga justicia.
Tras pasar casi dos años acampados en la puerta del Ministerio de Justicia, el Tribunal Supremo ha reabierto el caso. En su escrito, el Alto Tribunal no solo habla de negligencia médica, sino de 'maquinación fraudulenta para ocultar la realidad'.
Juana, que nos ha confesado que su hijo "estaba ayer muy contento", asegura que no piensa abandonar la plaza de Jacinto Benavente "no quiero que esto se olvide. Sé, que si me voy no voy a tener fuerzas para volver. Se ha ganado una batalla, pero no la guerra".
"Juana es una madre muy fuerte"
Antonio, el marido de Juana, ha querido dar las gracias a "los vecinos y a la gente de toda España que nos ha apoyado desde el principio. Los dueños del kiosko de prensa de aquí al lado son muy amables, ya que la luz que tenemos es gracias a ellos".
Pero Antonio no ha querido dejar pasar la oportunidad para contarle a Juana y a toda España que "agradezco su fortaleza durante todos estos años. Es una madre muy fuerte".