IGUAL TIENES QUE REPLANTEARTE TU DIETA
Siete señales que indican que algo va mal en tu aparato digestivo
Malas digestiones, acidez, reflujo, irregularidad a la hora de ir al baño... Si tienes alguno de estos problemas, no lo des todo por perdido pensando que es lo que hay. Algo va mal en tu aparato digestivo y tiene que ver con lo que comes. ¿Y si lo cambias?
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1- Estreñimiento. No podemos aceptar que no vamos al baño a diario y que nuestra relación con ese asiento tan particular de la casa es intermitente y tormentosa. Es cierto que hay personas que tienden más al estreñimiento que otras, pero también lo es que es posible ir al baño a diario cambiando algunos detalles de la alimentación. Apuesta por las semillas (el lino va a ser un aliado de excepción) y la fibra, y reduce el trigo refinado y otros astringentes como los lácteos. Incrementa la ingesta de frutas y verduras, e intenta no recurrir a enemas y otras soluciones a menos que sea estrictamente necesario. Pero sobre todo, métetelo en la cabeza: ir al baño a diario es posible. Y no sólo eso, es necesario. Verás como cuando lo logres te sientes mucho mejor, pero es una carrera de fondo.
2- Acidez. Todo el mundo la ha experimentado en algún momento, pero si la acidez es frecuente es que algo no va bien. Se trata de un dolor agudo que va del esófago hacia la garganta, y que resulta profundamente desagradable para el que lo padece. Elimina alcohol, cafeína, picantes y, sobre todo, no te pegues grandes comilonas. Si tienes problemas de acidez es mejor que comas cosas ligeras con frecuencia y en cantidades pequeñas. Evita, además, tumbarte nada más comer y haz ejercicio regularmente. Si te sobran unos kilitos, ya tardas en ponerte a dieta: tu acidez mejorará.
3- Gases. Elimina inmediatamente coles, repollo, brócoli, refrescos carbonatados o coles de Bruselas. Y, sobre todo, procura relajarte y evitar el estrés y la ansiedad. Tambiés es muy importante masticar bien los alimentos, no comer chicles, no comer precipitadamente y no comer grandes cantidades. Algunas infusiones, como el té de canela y el diente de león, ayudan a controlar los gases.
4- Dolor. Si te duele el estómago después de las comidas es que algo va mal. Si ese malestar está asociado al estrés es importante aprender a relajarte con las técnicas que te vayan mejor. Hacer ejercicio regularmente y evitar comidas copiosas, salsas, picantes, alcohol y tabaco será de gran ayuda.
5- Hemorroides. En líneas generales la aparición de hemorroides va asociada al estreñimiento, de manera que hay que intentar ir al baño con regularidad. Cuando son demasiado molestas, las hemorroides se pueden operar. A veces confundimos con hemorroides las fisuras anales, que pueden aparecer por los mismos motivos y suelen curarse espontáneamente.
6- Hinchazón. El abdomen excesivamente hinchado puede significar que nuestras digestiones no funcionan correctamente, que estamos reteniendo líquidos o tenemos gases. Para aliviar un vientre excesivamente hinchado, es fundamental beber líquidos y hacer ejercicio, eliminar el café y la leche y apostar por tés e infusiones depurativas.
7- Náuseas y vómitos. Si tras las comidas aparecen estos síntomas es importante consultar con un médico, porque puede deberse a algún trastorno del aparato digestivo o a un cuadro de estrés y ansiedad.
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