Padres

Una agencia de Barcelona pone en contacto a personas que quieren ser padres o madres, pero no solos: "No es el tinder de la maternidad"

Buscan padres compatibles para los pequeños a través de una exhaustiva entrevista. Además, los padres deberán crear un vínculo durante un año.

Publicidad

El próximo mes de octubre nacerá en Barcelona una niña fruto del régimen de copaternidad. Es decir, personas que quieren ser padres y madres, pero no pareja. Y tampoco quieren criar a su hijo solos. Dejan fuera la relación romántica. Desde 2021, una agencia con sede en la ciudad condal se dedica a ello. Un equipo de Antena 3 Noticias habla con su fundadora, la antropóloga Carmen Balaguer.

"Sobre todo unimos y acompañamos en el proceso a las personas que han llegado a cierta edad y no han encontrado pareja y quieren buscar a alguien con quien poder crear un vínculo fuerte", a lo que añade que "creo que es una oportunidad para decir '¿por qué no se puede separar la pareja sentimental de la familia?', es otro modelo distinto".

Hablamos con Laura. Hace un año empezó el proceso en la agencia de copaternidad.com de Carmen. "Yo llegué a los 40 y no tenía pareja. Me planteé la copaternidad o ser madre soltera, pero opté por la primera porque quería compartir la experiencia con otra persona, crear un equipo, formar una familia y poder darle el mejor entorno al bebé". Además, relata que quería que su hijo o hija en un futuro tuviera personas con las que contar "si a mí me pasa algo quiero que haya otro progenitor que pudiera cuidar del pequeño". Laura añade que el futuro padre no será un desconocido para ella. "Si al final quedas todas las semanas con la persona, conoces el entorno, al final es una persona muy importante".

La llamada copaternidad no ha estado exenta de controversia. Algunos han bautizado como el 'tinder de la maternidad' a la agencia de Balaguer, algo que ella niega en rotundo: "Para empezar, esto no es una aplicación, no vas pasando un catálogo; y segundo, que aquí nuestro trabajo no es solamente presentar a personas, sino acompañarlas en todo el proceso, ayudar a que se hablen los temas importantes y, si es necesario para ellos, hay terapeutas o psicólogos que les acompañan también en el proceso, hay asesor de crianza".

Nos cuenta que cuando empieza el proceso se realiza una evaluación exhaustiva a ambas partes, tanto psicológica como otros aspectos. Cuando encuentran que dos personas pueden ser compatibles -en cuanto a intereses de crianza de los niños, educación, etc.- les ofrecen un encuentro en un sitio público.

"Y si al cabo de los meses se deciden, antes de ir a la clínica, se firma un documento en el que han estado de acuerdo los dos y que es privado. Una vez nace, se firma y se ratifica ante el juez el convenio regulador con la custodia que hayan decidido".

En la calle, opiniones de todo tipo, pero la antropóloga afirma que "hay un cambio social evidente, entonces decir que estamos mercadeando, no. Hay personas que tienen ese deseo de ser padres y madres y que por circunstancia no puedes o no quieres en solitario y entonces, ¿ qué hacen? Pues tendrás que buscar remedio".

La opinión de los expertos

Hablamos con algunos expertos. La psicóloga infantil María Lluisa Ferrerós cree que con la copaternidad se está poniendo el foco en el deseo de los adultos, no en lo que necesita el niño. "Da la sensación que cosificamos a los hijos, es algo como muy deseado, se convierte en un objeto el hecho de ser madre. Es convertir al hijo como un objeto de deseo".

Por su parte, el abogado de familia Manuel Hernández, de Vilches Abogados, explica que "cuando dos personas deciden una copaternidad lo ordinario es que las dos partes configuren un convenio regulador en el que distribuyen el sistema de custodia y todo aquello que va a afectar a la vida en común del menor. Esto no varía si hay relación sentimental o no".

También indica que " este convenio va a resolver todas las cosas que afectan al pequeño: a la custodia, las medidas de pensiones, si existieran, los gastos, la custodia compartida, las vacaciones etc". Según el letrado lo recomendable es acordarlo previamente. "Es muy importante que los progenitores tengan una relación de tolerancia y respeto y comunicación en beneficio del menor. Cuando no ha habido relación sentimental si no una decisión común, nacida por lo que fuere, para tener hijo es importante que la comunicación sea previa al nacimiento".

A pesar de este nuevo régimen el niño o la niña deberán llevar los apellidos de ambos progenitores.

Publicidad