García-Page cree que la modificación del delito de sedición tendrá consecuencias: "Las facturas las vamos a pagar a corto o medio plazo"

La ley del 'Solo sí es si' ha provocado una nueva tormenta política en la Moncloa. Se suma a la polémica que generó la reforma del delito de sedición, una reforma que sigue dando que hablar.

En una entrevista en 'La Vanguardia', el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha argumentado que avanzaban en un pacto basado en "profundizar la independencia judicial y despolitizar la justicia" pero, mientras negociaban, "en la habitación de al lado se está llegando a un pacto para hacer justo lo contrario". A su juicio, la reforma del Código Penal relativa al delito de sedición supone "dejar sin efecto" las sentencias del Tribunal Supremo, por lo que "lamentablemente" el PP dijo "no" tras confirmar que les estaban "engañando".

Para Feijóo, el presidente ha vuelto a elegir y siempre que ha habido ocasión ha acordado con el "independentismo y el populismo y siempre ha despreciado al PP". En su opinión, eliminar el delito de sedición soluciona "los problemas de Sánchez y de los independentistas de Esquerra y no los problemas de Cataluña", hasta el extremo de que "la igualdad ante la ley se ha quebrado".

En los últimos días, el PP ha multiplicado sus mensajes a los barones socialistas, a los que dirigentes populares han pedido desde sus autonomías que rechacen la supresión del delito de sedición. La meta, admiten en el PP, no es tanto lograr que se rebelen, como desgastar a estos líderes en sus propios territorios, con la vista puesta en las elecciones del 28 de mayo.

Este domingo, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en una entrevista en el diario 'La Razón' ha asegurado que no comparte la decisión del Gobierno pero que no le queda otra que aceptarla, aunque cree que habrá consecuencias. "Es evidente que las facturas de lo que ahora estamos haciendo las vamos a pagar a corto o medio plazo", ha aseverado.

En esa entrevista, Page ha dicho que Pedro Sánchez no le informó sobre su decisión de reformar el delito de sedición. También ha sido muy crítico con sus socios de gobierno, Podemos: "Si el PSOE gobernara en solitario estaríamos en niveles del 40 por ciento del voto. Ahora mismo el mayor desgaste que tiene el PSOE son las compañías".

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