"Cuanto un político muere, todos hablan bien de él", aseguraba el histórico líder comunista Santiago Carrillo en una entrevista con la periodista de Antena 3 Noticias María Rey en febrero de este mismo año, con motivo de un programa especial en homenaje a Adolfo Suárez.

Carrillo, a sus 97 años, reflexionaba sobre el momento de la muerte: "Unos alaban por dolor o sentimiento y otros lo hacen por satisfacción. Casi todos subrayan lo bueno que han visto en el fallecido. Yo, como todavía estoy vivo, sigo teniendo adversarios. En el fondo ayuda a vivir, porque la adrenalina ayuda a mantenerse"

"Pero cuando yo me muera -añadía- seguro que hay gente que no me ha tolerado en vida pero que, alegres y satisfechos por mi desaparición, no les costará ningún trabajo decir que hice alguna cosa buena".

En otra entrevista con Antena 3 Noticias, Carrillo explicaba cómo vivió sus primeros discursos: "Yo empezaba los discursos diciendo: 'no tengo cuernos, ni pezuñas, ni rabo, no huelo a azufre, no soy el demonio'. Había gente que tenía de nosotros la imagen satánica, por desgracia muchos".

El líder comunista ha fallecido en Madrid a los 97 años. Desde hace unos meses Carrillo se encontraba enfermo y había sido ingresado en varias ocasiones. Es una figura clave en la lucha contra el franquismo y de la Transición.