El Valencia Basket ganó con autoridad en la cancha del Unicaja (59-88) y selló su pase a las semifinales de la fase por el título, en un partido en el que fulminó al equipo malagueño, inferior prácticamente en los 40 minutos, sobre todo a partir del descanso, cuando dejó de creer en la remontada.

Los malagueños, que habían caído en el primer choque de la eliminatoria en Valencia (79-75), perdieron totalmente la concentración en la segunda parte tras varias decisiones arbitrales polémicas que acabaron de hundir al equipo entrenado por Joan Plaza, mientras que el Valencia Basket apretó para sentenciar por la vía rápida. El partido fue muy intenso en su inicio, pero el conjunto valenciano, más certero y con menos fallos que el Unicaja, marcó el ritmo y fue siempre por delante en el marcador con un gran acierto desde la línea de triples, cuatro anotados de seis lanzamientos.

El base francés Antoine Diot sobresalió con dos triples, junto con el ala-pívot lituano John Shurna y el alero Peterson, con lo que el acertado equipo levantino cerró el primer cuarto con ocho puntos de ventaja (12-20). Sin embargo, el Unicaja se transformó en los primeros cuatro minutos y medio del segundo cuarto, en los que dejó al equipo valenciano sin anotar y, con un contundente parcial de 9-0, le dio la vuelta al marcador (21-20, m.14).

El Valencia Basket, con muchos problemas para anotar, tenía que reaccionar en un momento complicado, lo que hizo que su técnico, Pedro Martínez, ordenara a sus pupilos ajustar la defensa para que el Unicaja volviera al camino negativo. Este resurgir de los valencianos les dio sus frutos, pues el equipo andaluz, con una elección errónea de lanzamientos y su endeblez defensiva, volvió a ceder el protagonismo a los visitantes, que se fueron al descanso con un triunfo parcial por 29-34.

En la reanudación, el Unicaja no se encontraba a gusto y varias decisiones arbitrales le desquiciaron por completo, con sendas técnicas a Plaza y al escolta francés Edwin Jackson por protestar, lo que aprovechó el pívot montenegrino Bojan Dubljevic para anotar desde la línea de tiros libres y distanciar a su equipo (33-49, m.24). El conjunto cajista no despertaba y el Valencia Basket jugaba a placer con triples del ex del Unicaja, el escolta islandés Jon Stefansson, y de Fernando San Emeterio, para sentenciar el tercer periodo por 50-67.

El Valencia, con un gran Justin Hamilton -el pívot estadounidense fue el máximo anotador del encuentro con 22 puntos, más 6 rebotes-, tenía controlado el choque ante un Unicaja desmoralizado y que se vino abajo.

En medio de las protestas de su público por el arbitraje, los malagueños firmaron unos diez minutos finales plenos de desaciertos en su despedida de la temporada, mientras que los valencianos ampliaron aún más su distancia para acabar 29 puntos arriba (59-88) y solventar sin ningún problema la eliminatoria.