Un olímpico Hamilton logra la pole en Hungría sin oposición con Alonso sexto

Inconmensurable. Esa palabra es la que mejor define la actuación de Lewis Hamilton en lo que llevamos de GP de Hungría y ha demostrado su total superioridad den Q1, en Q2 y en Q3 logrando la pole en Hungaroring con total justicia al parar el crono en 1:20.953 ante la estéril resistencia de Romain Grosjean, de Sebastian Vettel y de un Fernando Alonso que saldrá desde la sexta posición en la parrilla húngara.

Y es que el británico de McLaren no tuvo rival alguno desde el mismo momento en que Lewis pisó Hungría. Hamilton ha demostrado en menos de un minuto y medio que la crisis que atravesaba y que le habían llevado a tener algunas malas actuaciones en los últimos grandes premios son agua pasada. Porque no sólo ha superado a los demás y a sus tiempos, sino también a sí mismo con un último giro que ha pulverizado su mejor crono.

Un crono inalcanzable, incluso para un clasificador nato como es Romain Grosjean. El galo lo ha intentado y, aunque ha vuelto a superar en el duelo Lotus a Raikkonen a una vuelta, no ha podido hacer nada contra el McLaren, contra una ventisca de plata que congeló al resto y que impidió que hubiera alguien capaz de oponer resistencia.

Tampoco pudo Alonso hacer frente a Hamilton, aunque en seco el Ferrari también corre lo suyo, algo que quedó demostrado con el gran tiempo de Massa, séptimo. Pero también es cierto que el asturiano no dio señas de estar cómodo en su monoplaza durante gran parte de los Libres 3 y en todo el tiempo que duró la clasificación, bien por el tráfico o bien por el nervioso comportamiento del coche por los reglajes.

Por una cosa o por otra, la verdad es que Fernando parecía más preocupado por la carrera que por luchar por la pole en Q3. Alonso rodó una vuelta en plena batalla por ocupar la primera plaza de la parrilla de salida en Hungaroring en un síntoma que indica que el ahorro de neumáticos será fundamental en las estrategias y que denota más si cabe la idea del asturiano de que las carreras son muy largas.

Webber y los Mercedes decepcionan
Pero al menos el asturiano pudo rodar en Q3 y pelear por una pole imposible, algo que no pudo decir Mark Webber. Mientras Vettel aprovechaba todo el terreno que tenía dentro de pista y también de fuera para ser tercero, el australiano se quedaba fuera en Q2 al no obtener uno de los diez mejores tiempos y ver cómo la mejoría de Bruno Senna le dejaba fuera en plena crisis del mapa motor de los Red Bull.

Pero para crisis, la de Mercedes. En ningún momento de la clasificación se ha sentido cómoda la escudería alemana y, a pesar de pasar con relativa solvencia la Q1, en la Q2 ha llegado el hundimiento. Ni Schumacher ni  Rosberg han dado muestras de esperanza para pelear por algo más que por la mitad de tabla y lejos queda esa bala plata y verde que quemaba el asfalto a una vuelta.

Suerte que ni unos ni otros quedaron fuera de la Q1, porque los Red Bull estuvieron cerca, muy cerca. De hecho los dos pilotos de la escudería de las bebidas energéticas ocuparon las últimas plazas que daban acceso a la Q2, confiando en la degradación rápida del neumático blando y que el abundante tráfico cortara las pequeñas alas del Toro Rosso de Ricciardo.

HRT, lejos de Marussia en Hungaroring
El australiano de la filial de Red Bull fue uno de los que cayó en la primera criba clasificatoria. Junto a él, los dos Catterham de Kovalainen y de Petrov, los dos Marussia de Glock y de Pic, y los dos HRT de De la Rosa y de Karthikeyan. El español consiguió batir, una vez más, a su compañero de equipo pero él mismo reconoció a final de carrera que siguen lejos de los monoplazas del alemán y del galo.

Pinta bien, muy bien, la carrera para Lewis Hamilton. Y no por el hecho de salir desde la pole, sino porque justó detrás de él sale Romain Grosjean, que no es precisamente el piloto más fiable cuando sale desde las primeras posiciones. Pero la carrera, como dice Alonso, es muy larga, y a buen seguro que Fernando estará en la pomada por entrar en el podio y por luchar por la victoria.