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Dennis, un bebé pató, quedó huérfano solo una semana después de su nacimiento cuando su madre fue mutilado por un zorro en el campo.

El pequeño pato habría muerto de no ser por Fred, un perro labrador, y su dueño Jeremy Goldsmith, de 44 años.

Sorprendentemente el perro encontró al patito y de inmediato comenzó a limpiarle el barro con su lengua. Ahora son inseparables. Duermen juntos, juegan juntos e incluso van a nadar en el estanque local.

Jeremy dijo que "es increíble ver a los dos juntos. Desde que se encontraron, Dennis no ha dejado de seguirle y Fred más o menos lo adoptó".

Jeremy añade además que lo importante será ver la evolución de su relación:  "Será interesante ver el patito a medida que crece. Él adora a Fred, así que estoy seguro que va a recoger algunos rasgos caninos. Estoy esperando que empiece a ladrar y perseguir a los gatos".

No es la primera vez que Fred se muestra así de cariñoso con un animal de otra raza. Según su dueño, creció con muchos animales distintos y llegó a hacerse cargo de Lupin, un gamo.

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