Nada más salir de la celda de aislamiento, Macarena recibe las amenazas de Zulema: la egipcia quiere evitar que la nueva cuente que ambas fueron las últimas en ver con vida a la presa asesinada. Ello apuntaría a Zulema como responsable de la muerte de Yolanda. Para colmo de males, cada vez son más evidentes las lujuriosas intenciones del médico hacia Macarena.

La directora informa a sus empleados de la marcha de la investigación policial: para matar a Yolanda, la presa que escondía 9 millones de euros fuera de la cárcel, es necesario contar con la colaboración de algún funcionario. Fabio, Palacios y la gobernanta se niegan a confesar ningún tipo de colaboración en el crimen.

Leopoldo y Encarna visitan por primera vez a su hija en la cárcel. Macarena recibe todo su apoyo pero también le dejan claro que ya es hora de que empiece a tomar sus propias decisiones. El padre pone en marcha un plan conseguir sacar a su hija de la cárcel lo antes posible.