Tristán va a buscar a Pepa y le pide que vuelva con él, que ahora lo tienen todo de cara para vivir juntos. Ella corta con él, su amor no es posible, ha dudado demasiado de su inocencia. Angustias pide amor a Tristán y éste no le engaña, ya no le ama. Angustias se desespera aunque intenta afrontarlo. Se la van a llevar al sanatorio, antes de que esto suceda va a la habitación de Pepa para matarla.
El marqués amenaza a Francisca, si Soledad no se casa con él se llevará la mitad de la hacienda igualmente y se ocupará de pasear por le fango el apellido Montenegro. Francisca totalmente indignada por la amenaza tiene que conseguir, como sea, que Soledad acceda a casarse y le pide ayuda a Tristán para que convenza a su hermana.
Juan da la cara y se presenta en el pueblo. De la conservera llega la noticia de que un accidente ha mutilado a un empleado mientras hacía horas extra. Raimundo se ha hecho las pruebas porque su enfermedad empeora sin remedio, pero no consigue reconciliarse con Sebastián. La relación entre padre e hijo es cada vez más tensa.