Nueva sección 'La Revuelta'

Adictos a aplicaciones para ligar: "Llevaba 3 años sin beber alcohol, me la instalé y empecé a notar que algo no iba bien"

Las aplicaciones para ligar son para muchos una fuente de adicción. El periodista Diego Revuelta habla con distintos usuarios que vieron que su uso se convertía en algo más que un hábito.

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El periodista Diego Revuelta ha estrenado su nueva sección 'La Revuelta' en la que cada semana tratará temas de actualidad desde otro punto de vista. En este caso Revuelta se introduce de lleno en una adicción que cada vez afecta a más personas que es la de las aplicaciones para ligar.

El primer paso para utilizar esta aplicación es descargar en nuestro teléfono móvil y crear una cuenta con nuestros datos personales.

Esther es una usuaria habitual de aplicaciones para ligar. Cree que llegan a convertirse en adictiva porque son una App que si estás aburrido puedes mirar para distraerte y por ver "si veo a algún chico guapo".

Lleva 2 meses en Tinder y ya ha quedado con más de 5 chicos. La misma tarde de la entrevista confiesa que tiene una cita. "Es todo muy a saco y al final te sientes un poco trozo de carne porque la otra persona no busca más allá de eso. Hay conversaciones que desde el minuto 2 empiezan a sexualizarse. No tiene porque ser que vas a tener sexo", relata.

Algunos usuarios en la bio directamente te dicen que quieren tener sexo. "Si buscas que vas a encontrar el amor de tu vida ahí es difícil".

La recomendación de los sexólogos en el uso de estas aplicaciones

Eva Moreno, sexóloga y terapeuta de parejas, señala que el uso de estas aplicaciones es sano siempre que sea saludable pero la cuestión está en "volverse adicto". Actualmente hay un millón y medio de personas mayores de 18 años enganchados a ese tipo de aplicaciones, señala la experta.

Un caso distintos es el de Álvaro, fue adicto a las drogas, lo superó y nunca pensó que se hiciera también adicto a esta aplicación de citas. Superó su adicción en un centro a través de una terapia de grupo. Después de un tratamiento de dos años él mismo se animó a ayudar a otro tipo de gente a superar sus adicciones.

"Tinder funciona de un modo muy similar al de las drogas. Cuando llevo 3 años sobrio sin tomar nada estoy soltero y me instalo Tinder. Entonces empiezo a notar que hay algo ahí que no va bien", confiesa. Cree que uno de los componentes más atractivos es el de seguir con uno y otro 'match'. "Convierte lo que antes era salir una noche de fiesta en que ahora puedas hacerlo 7 u 8 veces más en un día".

Considera que en Tinder a veces el sexo es lo menos importante, es la punta del iceberg. "Tiene un potencial adictivo en la conquista y lo que eso conlleva, en lo que significa para una persona que alguien quiera acostarse contigo".

Finalmente eliminó la aplicación para darse un tiempo de respiro y de reflexión y tomar medidas que te acerquen a lo que quieres conseguir. Sin embargo, aunque reconoce su componente adictivo es gracias a Tinder como conoció a su mujer, madre de sus hijos: "Es una herramienta muy buena que hay que aprender a usar y utilizar bien", concluye.

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