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La Cadena Ser ha revelado el contenido de dichas conversaciones en las que se quejan del cúmulo de chapuzas que se cometieron. "Lo que han hecho es un parche, cómo van a quitar el rele?".

Sorprendido y enfadado, así reacciona el tercer ocupante de la cabina del MD 82 de Spanair al comprobar queno han cambiado el relé que hizo abortar su primer despegue aquella mañana de agosto de 2008.

Estas conversaciones se reflejan en el informe judicial de la caja negra. Por ellas se ha podido saber que los mecánicos bajaron la temperatura de la sonda del avión con bolsas de hielo, una chapuza que costó la vida a 154 personas.

Minutos antes del accidente los ocupantes de la cabina comentan los tres incidentes que habían tenido esa misma semana.

El copiloto muestra su disgusto por el retraso del vuelo, su novia, que se había desplazado de Salamanca a las Palmas tendría que esperarle hora y media en el aeropuerto.

A pesar de la desconfianza y las dudas en torno al trabajo de los mecánicos, el comandante inicia el despegue mientras uno de ellos bromea diciendo "toco madera", casi al mismo tiempo comienza a sonar una alarma en cabina porque los dispositivos de despegue no funcionan.

"¿Cómo coño se quita la voz?" grita uno de ellos presa de los nervios y después el final. "¡Vuela el avión me cago en la mar, vuélalo!" grita el comandante.

Su última palabra mierda y el último registro de la caja negra un grito desesperado del copiloto.154 personas perdieron la vida. 21 consiguieron sobrevivir.

El juez del 'caso Spanair' toma declaración a seis nuevos testigos

 

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