Las mujeres embarazadas e infectadas por coronavirus están consideradas grupo de riesgo por posibles complicaciones, que en ocasiones, sobre todo al principio de la pandemia, acabaron en cesárea. Queda mucho por investigar pero se sabe que no hay transmisión de la enfermedad de madre a bebé.
Por ahora no se puede demostrar que los bebés contagiados con Covid-19, no llega al medio centenar, se hayan contagiado vía placenta materna.
Sobre todo al principio de la pandemia, uno de cada tres partos se realizaba por cesárea, las mujeres embarazadas según la OMS tienen más riesgo de complicaciones y los síntomas más típicos son la tos y la fiebre, pero también hay un alto porcentaje de asintomáticas.
Han nacido ya en nuestro país 2.300 niños de madres infectadas de coronavirus, muy pocos han tenido que ser tratados y en tan solo dos o tres días estaban de nuevo con sus madres.
Aren va a nacer en pandemia, pero afortunadamente la mayor preocupación de sus padres es estar juntos. En el Hospital Universitario de Torrejón de Ardoz, Madrid, evitan cualquier contacto con el coronavirus. El padre y la madre tienen que hacerse una PCR antes de entrar en el hospital.
Al principio de la pandemia saltaron todas las alarmas, las experiencias con coronavirus anteriores no eran buenas para las embarazadas. Pero los obstetras, pediatras, matronas buscaron rápidamente información en China en Italia y se vió que si todo va bien madre e hijo pueden hacer la cuarentena en casa.
