Los cuatro años de Batet como árbitro del Congreso en una legislatura bronca

Fue el 3 de diciembre de 2019 cuando Meritxell Batet, tras un largo pleno de constitución del Congreso, es proclamada como presidenta de la Cámara Baja. Para ello, necesitó dos votaciones. En la primera vuelta, cuando requería de una mayoría absoluta, recibió 167 apoyos y en la segunda que bastaba con una mayoría simple, consiguió 166. Estos 166 apoyos fueron ofrecidos por el PSOE, Unidas Podemos, Más País, PNV, Partido Regionalista de Cantabria y Coalición Canaria-Nueva Canarias.

Durante su mandato, las llamadas al orden han sido habituales, al igual que los momentos tensos. La socialista catalana, en numerosas ocasiones, ha tenido que pedir respeto e incluso protagonizar enfrentamientos directos con diputados. Uno de los más sonados fue con Macarena Olona, entonces portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados. En total, han sido cientos de sesiones, miles de debates, pero no todos han sido sencillos, como el de la aprobación de la reforma laboral.

Un decreto ley -desde entonces, vigente- que recogía el nuevo marco de relaciones laborales pactado por el Gobierno de coalición junto con los agentes sociales, y que salvado por la mínima -con 175 votos a favor, 174 en contra y ninguna abstención- salió adelante. Un pleno que fue polémico por un 'sí' votado, según fuentes parlamentarias, debido a un error humano del diputado del PP, Alberto Casero, frente al error técnico en la votación que alegaron las fuentes populares.

Otro momento complicado para Batet, fue cuando decidió proceder al cierre del Congreso durante la pandemia tras el rechazo posterior del Tribunal Constitucional. La ahora expresidenta de la Cámara Baja ha sido cuestionada, pero también ha sido aplaudida, y ha moderado no solo una, sino hasta dos mociones de censura promovidas por Vox.

¿Quién la sustituirá?

A menos de 48 horas de que comience la XV Legislatura de la democracia española - 17 de agosto- y de que se constituyan las Cortes Generales (Congreso de los Diputados y Senado) y sus respectivas Mesas, -las cuales permitirán medir los apoyos que tienen uno u otro partido, e intuir así, cuál podría ser la legislatura que más prospere- aún se desconoce el nombre del candidato que sucederá a Meritxell Batet como presidente o presidenta de la Cámara Baja.

Las negociaciones 'discretas', han dado paso en las últimas semanas, a reuniones aún más 'discretas'. A pesar del hermetismo y debido a la proximidad de la fecha, se han producido declaraciones que remarcan los intereses de cada grupo parlamentario. El bloque progresista ha sido el que más se ha pronunciado y tanto miembros del PSOE, como de Sumar, e incluso miembros de ERC -como la diputada Teresa Jordá- han manifestado el deseo de que sea un socialista el que presida el Congreso, aunque éstos últimos continúan advirtiendo que "sus votos no son gratis". Algunos medios han especulado con nombres como los socialistas Patxi López o José Félix Bolaños. Junts por su lado, continúa ejerciendo presión y su palabra será clave para decantar la balanza.

Por parte de la formación popular, inciden en la idea de presidir la Cámara Baja, tras ser la fuerza más votada. Fernando Clavijo, el secretario general de Coalición Canaria- formación con la que los populares aún negocian en busca del 'sí'- declaró su apuesta sobre que presida el Congreso un diputado o diputada de PNV. Una apuesta única, que no secundó ningún otro partido. El coordinador general de los populares, Elías Bendodo ha confirmado que tienen sus propios "planes" y que será Alberto Núñez Feijóo quien anuncie su candidato. La incógnita estará presente hasta el último momento.

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