A Leo Messi se le complica su salida del FC Barcelona, que nunca pareció sencilla. El argentino no se ha presentado a las pruebas PCR del club dando una nueva muestra de sus intenciones, conocidas en el ya famoso burofax.
Messi comunicó al Barcelona que no quería seguir en el club, y ha intentado reunirse con el club para acordar una salida amistosa, pero se ha encontrado con la negativa de la directiva. Bartomeu estaría dispuesto incluso a dimitir si el argentino aparece públicamente y dice que se queda en el Barça.
Toda una serie de capítulos que se han ido sucediendo a lo largo de la última emana y que también implican a Luis Suárez. El uruguayo, con el que Ronald Koeman parece no contar de cara a su nuevo proyecto, se ha reunido varias veces con Messi en los últimos días. Suárez si ha ido a realizarse las pruebas junto al resto de la plantilla.
LaLiga se ha manifestado por primera vez a través de un comunicado, y su mensaje no puede ser más claro. "El contrato se encuentra actualmente vigente y cuenta con una cláusula de rescisión". Es decir, el argentino tendrá que pagar los 700 millones de euros si quiere dejar el Barcelona. A través de este comunicado oficial LaLiga ha dado la razón al club en este aspecto.
Se complica la salida de Messi, al que ya esperan impacientes en el Manchester City de Pep Guardiola. Por el momento, el argentino no estará mañana en el primer entrenamiento dirigido por Ronald Koeman.
