Los accidentes de tráfico son la principal causa de las lesiones que fracturan la médula y los jóvenes so los principales afectados.

Cuando la lesión es completa poco se puede hacer. Se estabiliza la columna para no ir a peor y los pacientes se resignan a vivir con una extrema discapacidad. En el hospital madrileño de Puerta de Hierro se empeñaron hace 10 años en que esto cambiara, pero de momento, los avances de su investigación, se han provado sólo en animales.

A los pacientes se les extraen células de su propia médula osea que se tratan en una sala especial. No saben que efectos secundarios puede tener esta terapia en el cuerpo humano, por eso la selección de pacientes es muy rigurosa y se aplica fundamentalmente a pacientes con una discapacidad muy severa, y a los que no se les puede causar un daño mayor que el ya que tienen.