La convivencia entre Gustavo y Esteban se hace insoportable, por lo que deciden que Esteban se encargue de las labores domésticas.
Por su parte, Tino contrata como camarera a la bella hija de su casero, por lo que correrá peligro su continuidad en el local.
Por otro lado, Susana como no consigue encontrar trabajo, acabará trabajando en la administración de lotería de su madre, amenazando el puesto de su amiga Candela.