Publicidad
Boom!
Boom!
Boom!
Boom!
Publicidad
Publicidad
Boom!
Publicidad
Un brindis ha evidenciado el buen rollo entre todos antes de que el juego dé paso a intrigas y traiciones de las que ninguno estará a salvo.
Parte el tren y los jugadores empiezan a conocerse, tratando incluso de tejer las primeras alianzas antes de llegar al monasterio.