Cantabria

Un vecino de Serdio embiste un 'dúmper' contra dos patrullas de la Guardia Civil para impedir el derrumbe del puente de Sel del Rey

Los vecinos del pueblo se oponen al derribo ya que es la única vía para poder desplazarse hasta sus fincas, ni cómo ir de unos pueblos a otros.

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Se están viviendo momentos de tensión en Serdio, Val de San Vicente, en la comunidad autónoma de Cantabria. La empresa Cuevas contratada por Adif quiere derribar el puente de Sel del Rey, y los vecinos de la localidad cántabra no están dispuestos a dejar que lo hagan. Ante esto, una veintena de vecinos se han plantado a las 06:00 de la mañana donde la maquinaria ya estaba preparada para proceder al derribo.

Poco antes de las siete de la mañana se ha vivido el momento más tenso hasta el momento, cuando un vecino se ha subido a un 'dúmper' de las obras (similar a un tractor) y lo ha embestido contra dos coches patrulla de la Guardia Civil. Uno de los vehículos acabó estrellado contra una marquesina.

La Guardia Civil ya estaba al tanto de la situación, por lo que acudió para salvaguardar a los operarios debido a la clara oposición a esta demolición que ya fue anunciada hace varias semanas. Otro de los puentes de la localidad, conocido como el puente de los Tánagos ya fue derribado, pero no se había opuesto tanta resistencia.

Sin embargo este derrumbe se prevenía complicado. Un primer intento de paralización por parte de los vecinos hizo que las máquinas de la empresa tuvieran que retirarse, ya que estos cruzaron su maquinaria en medio del puente para impedir la obra.

¿Porqué se oponen al derribo?

Ante la complicada situación, los vecinos quieren que previamente a que se ejecute la demolición se les dé una solución para poder desplazarse a sus fincas, además de soluciones para poder ir de unos pueblos a otros desde el municipio.

La tensión aumenta con el paso de los días, y los vecinos gritan y protestan sin cesar mientras los operarios de la empresa Cuevas siguen esperando instrucciones antes de poder ejecutar el derribo. Sin embargo todavía hay confusión y no se sabe ciertamente si el derribo podrá llevarse a cabo.

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