Ferrer sale airoso de la acusación de Morales de quedarse con las joyas, pero sigue intrigado sobre la misteriosa caja metálica. Satisfecho al creer que Jimena se ha rendido, planea la captura de los bandoleros, mientras Morales permite que Jairo visite a Jimena esa última noche en el calabozo. Joselito, más interesado por Pilar que por la carrera de Lucero, comienza a sacarle los cuartos y tiene un encontronazo con Jairo.