La historia del pequeño Ibai comienza el pasado 29 de Noviembre cuando el pequeño era sometido a una operación en el hospital de Cruces en Bilbao. Los médicos se disponían a quitarle un tumor, según ellos, sin importancia, que tenía en el abdomen. La operación fue bien, pero a los pocos días a Ibai se le disparó la fiebre, nadie sabía qué le pasaba. Es entonces cuando se dieron cuenta de que varios de sus órganos vitales comenzaban a fallar. "Algo había salido mal en la operación pero no se dieron cuenta hasta el jueves. Tuvimos que venir a Madrid de urgencias", dice Javier, su padre.

Ibai ingresó en el Hospital de la Paz en lo que los médicos llaman un 'código de urgencia cero', necesitaba un transplante de varios órganos vitales para sobrevivir. Sin embargo, milagrosamente sus órganos empezaron a reaccionar, por alguna vía le estaba llegando el oxígeno a estos órganos vitales. Esa vía era el tumor de Ibai.

No era un tumor cualquiera, sino el embrión de un gemelo parásito que le estaba ayudando a regenerar los órganos dañados, "hasta los médicos estan sorprendidos de que haya desarrollado una defensa propia" dice Javier.

Sin embargo, tras la operación en la que se la ha estirpado el tumor, los médicos han descubierto que se han encontrado órganos dañados. La situación es más delicada de lo que se creía. Ahora, el pequeño Ibai Uriarte necesita un multi trasplante.