La muerte un jornalero enfermo, que estaba detenido en el calabozo, provoca un gran revuelo entre la gente de Arazana y supone una nueva preocupación para Olmedo. Miguel comenta con Sara que Olmedo piensa regalar unos caballos de raza al nuevo gobernador... Sara, como jefe de los bandoleros, toma la decisión de robarlos y organiza el golpe junto a los suyos en las cuevas.
El Chato y Paquillo se hacen íntimos, el muchacho quiere seguir en la banda pero Sara pone todo su empeño en convencerle de que es mejor que se labre un futuro estudiando con Flor. Abel Hermida, el nuevo gobernador, descubre que Sara es sobrina del inglés Richard Thomas.