Olmedo se enfrenta a Roca e intenta reconciliarse, sin éxito, con Clara. Después, toma la decisión de iniciar sus planes de venganza en compañía del Chino y el primer objetivo será el nuevo capitán de la Guardia Civil.

Pedro, el marido de Clara, llega a la posada y le exige que se vuelva con él a su pueblo y deje de trabajar en el burdel.

Jimena habla de amor y sexo con Sara, que le recomienda que no se precipite en esa materia hasta que esté preparada. A su vez, Jairo, sin éxito, intenta arreglar las cosas con Pilar y habla con Morales de su relación con Jimena, confesándole que no tiene demasiada experiencia en cuestiones de sexo, aunque siempre ha intentado aparentar lo contrario.

Don Eusebio inaugura el despacho del nuevo ayuntamiento, invitando a los caciques de la zona y dejando en mal lugar a Pepe, que decide ponerse a beber para ahogar sus penas.

Alejandro se siente cada vez más enamorado de Elisa y demuestra ser todo un caballero ante ella.