Valeria, más ligera de ataduras tras poner su economía en manos de Augusto, decide tomar las riendas de su vida y emprender uno de sus sueños: montar un taller de confección de alta costura. Para ello, intenta contar con la ayuda de Marina.
Manolita y Asunción apoyan la idea a través de sus experiencias personales. Elena teme que esta idea dé alas a Valeria e instiga a Augusto para que acelere su estrategia de seducción.
Pese a la ilusión inicial por la aparente recuperación de Héctor, Asunción tocará fondo cuando descubra que su marido puede que nunca más recupere la consciencia. Bonilla, mientras tanto, seguirá debatiéndose entre sus sentimientos hacia Asunción o su lealtad hacia Héctor.
Luis, feliz por cómo su carrera como investigador empieza a despuntar gracias a un estudio sobre las vacunas que pronto será publicado, conocerá a Alejandra, una amable joven admiradora de su trabajo.
Manolita, arriba y abajo en su toma de posesión del hostal, se enfrentará sin saberlo a Belén, incapaz todavía de soltar las amarras de su negocio, pero Belén comprende que es tiempo de Manolita y finalmente la apoya en todo.