Revolución energética
Un barrio humilde de Madrid, referencia en España de ahorro energético
Manuela ha liderado a sus vecinos. Tras 9 años de lucha ha conseguido subvenciones del 80 % para aislar los 107 bloques de su barrio.
Manuela Navarro es vecina de toda la vida del Poblado Dirigido de Orcasitas. Un día observó que de la fachada de uno de los inmuebles se desprendía un bloque de hormigón de 600 kilos y se puso manos a la obra para conseguir que rehabilitaran el barrio entero. Este núcleo urbano nacido en el “desarrollismo” ya fue derribado por completo en los años 70 debido a la mala calidad de las construcciones.
Pero los bloques que se levantaron de nuevo, viviendas de protección oficial, no resultaron mucho mejores. Manuela lleva 9 años removiendo cielo y tierra para conseguir ayudas que hagan de su barrio un lugar confortable. En este tiempo han recibido de las distintas corporaciones municipales una subvención del 80 % para aislar las 2.140 viviendas del barrio. Es lo que quiere transmitir, que hay que buscar y pedir esas ayudas porque si ellos lo han conseguido, también se puede en otros barrios.
“En el barrio había familias y jubilados que no podían permitirse encender la calefacción. Ahora pagamos la mitad”
Manuela cuenta con orgullo que hasta su barrio han llegado comisiones de aparejadores y arquitectos de Francia, Suecia o Argentina para estudiar el barrio. También la Televisión suiza les ha hecho un reportaje como ejemplo de eficiencia energética. La prueba más reveladora la ofrecen las “termografías”. El antes: edificios de color naranja, muestra de todo el calor que escapa por las paredes. El después: el mismo edificio de color morado. Bloques por donde no escapa ni un grado al exterior. Conclusión: más calor dentro de casa, y menos contaminación a la atmósfera.
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Lorenzo no duda de las mejoras. “Hemos ganado 6 u 8 grados”. Está satisfecho de las subvenciones conseguidas, eso sí : “Este es un barrio humilde, y hemos tenido que pagar unos 5.000 euros por vecino”. Las derramas han ascendido a unos 70 euros al mes durante 3 años, algo según Manuela razonable, visto que el presupuesto de la obra alcanza los 400.000 euros por bloque. De momento los trabajos están realizados en más de la mitad de los bloques del barrio, pero todos los edificios quedarán aislados finalmente.