Para completar una semana muy musical en “El Hormiguero” hemos recibido la visita del artista colombiano Juanes, que está a punto de publicar su nuevo disco, Loco de amor (Universal Music), una vuelta de tuerca más en la carrera del autor de éxitos como “La camisa negra” o “Es por ti” regresa con un disco producido por el británico Steve Lillywhite (productor de los Rolling Stones, U2 o Killers entre otros) y regresa a sus orígenes musicales, el género popular, los ritmos folklóricos colmbianos, el rock y los toques electrónicos.
Ha contado que hubo un tiempo donde pasó una fase difícil donde pensó en dejarlo todo, además ha contado algunas anécdotas de las señales que recibía para frenar el ritmo de vida que llevaba, finalmente tras un descanso, Juanes ha vuelto con las pilas renovadas.
En honor a su nuevo single 'En mil pedazo' Trancas y Barrancas le han propuesto un interesante juego a nuestro invitado de la noche, Juanes. Le han enseñado un objeto roto en muchos pedazos que re iba recomponiendo poco a poco. El cantante ha tenido que adivinar de que objeto se trataba.
Vaquero: "Mi detector de radares me dice 'Pasopalabra'"
Vaquero da un satírico repaso a las nuevas normas de circulación en su monólogo
Magia con Jandro: Las cartas marchosas
Increíble el divertido truco de magia con el que nos ha sorprendido Jandro. Las cuatro damas de la baraja querían ir al concierto de Juanes, nuestro invitado las autografiado en el reverso, pero estás estaban atrapadas y no podían ir, sin embargo, las manos mágicas de Jandro han conseguido que viajen desde su particular 'jaula' al concierto de Juanes.
Ciencia con Marron: La tecnología al servicio del paciente
Marron nos trae un invento de lo más excepcional, nos presenta 'Liftware spoon' una cuchara pensada para aquellos pacientes con un Parkinson muy desarrollado, cuyos temblores ya les impide comer. Esta cuchara contrarresta los temblores para evitar que la comida se derrame. además nos ha enseñado dos inventos más.
El Golf-Gong
El Hombre de Negro nos trae una interesante prueba con dos golfistas profesionales. Uno de ellos golpea una pelota, el otro en el aire la tendrá que volver a golpear y apuntar hacia el gong que sonará. Tras varios intentos estos golfistas lo han conseguido.