Publicidad

LO CONSIDERA DISCRMINATORIO

El TS obliga a readmitir a Nerea, la controladora aérea militar excluida por no alcanzar la altura mínima requerida

El Supremo declara discriminatorio el requisito que exigía una estatura mínima de 1,60 metros para poder ejercer el cargo al que Nerea opositó.

El Tribunal Supremo ha anulado la exigencia de que los controladores aéreos militares tengan que medir como mínimo 1,60 metros, al considerarla discriminatoria. Esta medida venía impuesta por el Ministerio de Defensa, encargada de regular las pruebas de acceso.

Nerea, la mujer a la que la Justicia le ha dado la razón, comenzó a opositar en 2015 para ingresar en la Academia Básica del Aire para acceder a las plazas de la especialidad de Control Aéreo y Sistemas de Información y Telecomunicaciones de la Escala de Suboficiales del Cuerpo General del Ejército del Aire. Nerea, mide 1,55 metros.

Por entonces, Nerea había superado tanto la prueba de concurso como las pruebas de oposición. Con lo que no contaba esta mujer, es que fueran a descartarla a la hora del reconocimiento médico por no cumplir con la altura mínima requerida para acceder al puesto de trabajo.

"La Academia General del Aire deberá adjudicarle una plaza con todos los efectos correspondientes desde el momento en que se produjeron para los demás aspirantes que la obtuvieron", dice el Supremo en la resolución.

El juez estimó que el requisito por el que se rechazó a Nerea "no estaba justificado y entrañaba una diferencia de trato contraria al principio de igualdad".

Publicidad