Aplicación 'Sit with us'

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TRAS SUFRIR BULLYING

Una joven de 16 años crea una aplicación para que nadie coma solo en el instituto

Natalie Hampton, un joven estadounidense de 16 años de edad, ha creado una aplicación para que nadie coma solo en el instituto. "'Sit With Us' nació porque me he comprometido a asegurarme que ningún niño sufra como yo", explicó la joven.

A veces la etapa del instituto no es la mejor para todos, muchos jóvenes sufren acoso y marginación.

Esta es la historia de Natalie Hampton, un joven de 16 años de edad, de California. A ella, en primero y segundo de la ESO, la marginaban. "Es una experiencia horrible ser intimidado en el instituto. Aparte de los insultos verbales y violencia, una de las peores cosas fue tener que comer solo, y la vergüenza que pasas porque los demás te ven", indicó.

Conforme pasaban los años y ella cambiaba de instituto, cuando veía a alguien comer solo, lo invitaba a unirse a su grupo. Así surgió la idea.

"'Sit With Us' nació porque me he comprometido a asegurarme que ningún niño sufra como yo", confesó Natalie, quien añadió que los pequeños cambios graduales en una comunidad escolar pueden provocar grandes cambios.

Con la aplicación se pretende que los estudiantes se unan a otros grupos para comer de una forma anónima, y nunca más se sienten solos. Los estudiantes reciben una invitación de ‘embajadores’ para sentarse a la mesa con ellos. Estos 'embajadores' crean un evento 'open lunch' en el que se puede apuntar cualquier persona, según informa Daily News.

La creadora de la aplicación confesó: "La comunicación es privada, de esta manera nadie se siente inseguro o incómodo por buscar o aceptar invitaciones".

"Ahora el acoso es mayor que nunca, las redes sociales es una vía para el bullying, esta aplicación es una herramienta buena y necesaria", ha confesado Jim Delisle, un profesor de educación retirado. "Da una esperanza a los niños que necesitan alguien que se preocupe por ellos, a menudo estos pasan desapercibidos" añadió.

Natalie sufrió varios episodios de intimidación, la amenazaron con tijeras y le hacían la zancadilla constantemente. Esto le causó estrés, depresión y tenía pesadillas. También, la hospitalizaron por problemas de salud que le siguen afectando a día de hoy.

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