Día del Trabajador

La necesidad de una subida salarial marca las manifestaciones del 1 de mayo a menos de un mes de las elecciones

La necesidad de una subida salarial y la reducción de la jornada laboral han centrado las exigencias de las cerca de 70 manifestaciones que han tenido lugar en España este 1 de mayo.

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Este lunes 1 de mayo, Día de los Trabajadores, suele utilizarse en los países democráticos para que los sindicatos expresen sus reivindicaciones frente a los gobiernos. En el caso de España, los principales sindicatos; Comisiones Obreras y UGT, se han manifestado para lanzar advertencias a los empresarios. La necesidad de una subida salarial y la reducción de la jornada laboral han centrado las exigencias de las cerca de 70 manifestaciones que han tenido lugar por todo el país. Una fecha que, además, ha estado marcada por la cercanía de las elecciones municipales y autonómicas del próximo 28M.

En la manifestación de Madrid, que ha transcurrido entre Gran Vía y Plaza de España, se han citado unas 60.000 personas, según la organización, 10.000 según la Delegación del Gobierno, en las calles para reivindicar sus derechos. En esta concentración han participado cuatro ministros: Yolanda Díaz, María Jesús Montero, Irene Montero y Alberto Garzón. Todos ellos han cargado contra los beneficios de las empresas.

El Gobierno se une a los sindicatos para atacar a las empresas

En estas manifestaciones del 1 de mayo, el gobierno se une a los sindicatos para atacar a las empresas en la negociación de los convenios. Por su parte, UGT y Comisiones Obreras amenazan con un 'otoño caliente' en el caso de que no se produzca la subida de salarios que exigen. Pero no sería una protesta contra el gobierno, sino contra la CEOE, en plena precampaña electoral.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, y el secretario general de CCOO, Unai Sordo, han insistido al final de la manifestación en el lema de este año: 'Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios', y en la necesidad de que la patronal lo lleve a cabo cuanto antes. El secretario general de CCOO ha planteado la posibilidad de llegar a un "proceso de movilización general que tome la forma de huelga" en los sectores con convenios colectivos bloqueados.

Las reacciones de los ministros y los diferentes partidos

"Es un día de alegría, de esperanza, hoy hago un llamamiento a que los trabajadores y las trabajadoras en toda España salgan a la calle, lo hagan con alegría. Hoy los trabajadores y trabajadoras no salen con dolor como lo hacían cuando gobernaba el Partido Popular, hoy salen con unos pocos más de derechos" ha expresado la vicepresidenta Yolanda Díaz ante este Día del Trabajador.

Por su parte, el PP considera que las políticas del gobierno hacen daño a asalariados y a los autónomos. "La mejor garantía para el empleo es que Pedro Sánchez pierda el suyo", expresa Cuca Gamarra, que lamenta que sus ministros se manifiesten con los sindicatos.

La evidente conexión sindical con el gobierno también funciona en dirección contraria, del gobierno hacia los sindicatos. Es por ello por lo que hoy se ha podido ver a los cuatro ministros citados en la manifestación de Madrid y varios más en otras ciudades. Han estado presentes en esas marchas para unirse a la reivindicación sindical: no contra el gobierno, sino contra los empresarios, a tan solo 27 días de las elecciones municipales y autonómicas.

Los ministros coinciden en la pancarta -"subir salarios, bajar precios, repartir beneficios"- y en la reclamación: "es imprescindible subir los salarios", dice Yolanda Díaz, de manera que exigen a la patronal que esté "a la altura" y facilite un acuerdo pues "con salarios de 1500 euros mes no se puede vivir con dignidad". Reprochan a los empresarios que en un contexto de inflación no reflejen en los sueldos lo que consideran ganancias extraordinarias, para Irene Montero"los beneficios tan impresentables", "abusivos" para Alberto Garzón. Mientras que María Jesús Montero considera "bueno", que "esos beneficios se socialicen".

Consideran que el gobierno ha hecho su parte, pero según la oposición, son parte del problema. Además, Ciudadanos critica el servilismo de los sindicatos mayoritarios: "que se baje el umbral de representatividad del 10 al 3 por ciento", dice la portavoz, Patricia Guasp, mientras que Vox advierte de consecuencias si llega al poder: "cuando les echemos un gobierno sin miedo les va a quitar las subvenciones".

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