Euro digital
Los primeros pasos del euro digital: el Banco de España autoriza una prueba piloto
La fintech MONEI ha conseguido luz verde para emitir los primeros euros digitales de la historia. El proyecto facilitará el envío instantáneo de euros a nivel mundial.
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Nos hemos acostumbrado ya a pagar con el teléfono móvil o a enviar dinero de forma instantánea por Bizum. Pero el euro digital es un paso más allá. Y está cada vez más cerca de hacerse realidad. El Banco de España ha autorizado la primera prueba piloto. Será la fintech MONEI la encargada de hacerlo, emitiendo los primeros euros digitales de la historia. Los ha llamado EURM.
Esta fase de prueba que arranca hoy durará entre 6 y 12 meses y pretende ser el embrión del euro digital que está diseñando el Banco Central Europeo. "El futuro de los pagos es digital", asegura Álex Saiz Verdaguer, CEO y fundador de MONEI, "es nuestra oportunidad de demostrar al resto de Europa y del mundo que estamos a la vanguardia".
Cómo conseguir los EURM
De momento sólo estará disponible para operaciones dentro de España y un grupo de personas testará la aplicación, que es gratuita. Para conseguir los euros digitales, el usuario deberá introducir su número de teléfono, cotejar su identidad mediante identificación por vídeo y cargar el monedero con euros reales a través de Bizum.
De forma automática se crearán tantos EURM como euros reales ha depositado el usuario y ya puede mandar EURM al resto de usuarios registrados. El dinero estará custodiado en dos cuentas de salvaguarda de BBVA y CaixaBank y se podrá canjear por euros físicos en cualquier momento.
Para qué servirá el euro digital
El proyecto del euro digital va a facilitar el envío de dinero a escala mundial. Se trata de llevar los pagos a un nuevo nivel totalmente digitalizado. "Es la solución panaeuropea definitiva", añade Saiz Verdaguer, "que permitirá a los ciudadanos y empresas del continente enviar y recibir dinero instantáneamente".
Su creación abrirá un gran abanico de posibilidades en cuanto a pagos programables, que con los sistemas actuales no son posibles. Por ejemplo ofrecerá la posibilidad de enviar cientos de euros a fracciones de céntimos cada cierto intervalo de tiempo o prorratear un pago mensual en pagos diarios para poder hacer frente a algún coste que no podamos abonar en ese momento
El euro digital permitirá también a un comercio digitalizar programar el pago diario a sus proveedores según el consumo que haya habido ese día. O un trabajador podrá elegir también si quiere recibir su nómina con pago diario, semanal, quincenal o mensual, sin que suponga más trabajo para la compañía.
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