El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha asegurado a los dirigentes del PP que la transferencia de activos al futuro "banco malo" no supondrá "nunca" un coste para el contribuyente. Fuentes del PP han explicado que éste es uno de los mensajes que el ministro ha trasladado al equipo económico de los populares, en la reunión que han celebrado este miercoles.
El decreto que aprobará el Gobierno el próximo viernes será la "auténtica reforma del sistema financiero", según ha dicho el ministro en la reunión, en la que se ha insistido en que la nueva reforma no tendrá coste para la ciudadanía.
También han hablado los dirigentes populares y el ministro del problema de las participaciones preferentes, problema que, han insistido desde el PP, lo provocó el Gobierno anterior. El Gobierno está trabajando en una solución para los titulares de estas participaciones, que no se va a volver a generar, según ha subrayado el ministro a los dirigentes del partido.
En la reunión, Luis de Guindos ha explicado la hoja de ruta de las reformas del Gobierno de Mariano Rajoy, que pasan por Europa y que cuentan con el apoyo de las instituciones comunitarias, subrayan las mismas fuentes. También han hablado del fondo de liquidez para las comunidades autónomas como un instrumento de "compromiso" y "responsabilidad" con ellas.
Concretamente, respecto a la petición de ayuda lanzada por Cataluña, el ministro ha afirmado que estaba "perfectamente prevista" cuando se creó el Fondo de Liquidez Autonómico, así como que las necesidades de financiación ascenderían a unos 5.000 millones de euros. Ha añadido que la única condicionalidad que se impondrá será el cumplimiento del objetivo de déficit en 2012 y 2013.
Por otra parte, Luis de Guindos ha sostenido que "nadie está negociando ningún tipo de ajuste adicional" para conseguir que el Banco Central Europeo (BCE) intervenga en el mercado de deuda para reducir la prima de riesgo. Ha dicho que "es muy importante tener en cuenta que España va a cumplir sus objetivos presupuestarios independientemente de la intervención" del BCE.
De hecho, ha subrayado que "el compromiso del Gobierno de España con la consolidación fiscal es absoluto, es total" y eso es "lo que se tiene que tener en consideración por parte de los socios europeos". En cualquier caso, ha insistido en que el Gobierno "no ha tomado ninguna decisión" sobre la petición del rescate y "está analizando las alternativas, como no puede ser de otra forma, hasta que no se defina cuál van a ser el marco concreto" de actuación del BCE.
