Una orca discapacitada sobrevive gracias a la ayuda de su manada

Una orca discapacitada a la que faltan dos aletas es capaz de sobrevivir en el mar gracias a la ayuda de su familia, que obtienen alimento para ella. La joven orca no tiene aleta dorsal ni pectoral del lado derecho, por lo que es incapaz de cazar por sí misma.

Pero en lugar de ser abandonada a su suerte o morir, la orca recibe los cuidados de los miembros de su manada, que comparten su comida. Es una de las pocas veces que se ha visto a las orcas alimentar y cuidar a un miembro no cazador.

El fotógrafo submarino Rainer Schimpf se encontró con la manada mientras los miembros cazaban en aguas de Port Elizabeth (Sudáfrica). Schimpf ha asegurado que el mamífero es "incapaz de cazar rápido y capturar a las presas, por lo que tiene que depender de la manada, que la cuida muy bien".

"Esto demuestra que estos mamíferos no son sólo máquinas de matar sin escrúpulos, sino que también tienen complejas estructuras sociales en las que se cuidan entre ellos y de sus propios miembros con discapacidad", ha añadido.

Tal y como recoge Daily Mail, Rainer Schimpf ha estado siguiendo a esta manada de siete miembros, que miden alrededor de 15 metros de largo y pesan 15 toneladas cada uno. El hallazgo es uno de los pocos casos en los que las orcas heridas o discapacitadas han llegado a sobrevivir con la ayuda de su manada.

Pero este no es el único caso. En 1996, los investigadores descubrieron una orca joven a la que le faltaba la cola y parte de su aleta dorsal, probablemente amputado por la hélice de un barco. La orca herida, conocida como Stumpy, no fue vista durante mucho tiempo y ya había sido dada por muerta cuando reapareció de nuevo 7 años más tarde.