Expertos afirman que la tensión entre la UE y Rusia amenaza al turísmo y el comercio

Si se habla de poder militar, Rusia nos aventaja, pero si la guerra fuese de camisas y corbatas, y sobre todo, se librara en el tablero económico, sería un país frágil, vulnerable y desventajado.

En el saldo comercial, gracias al gas y el petróleo Rusia exporta más que Europa; unos 237.000.000 millones de euros frente a 160.000.000 millones. Sin embargo, la inversión directa europea en Rusia es de 167.000.000 millones de euros.

Rusia depende de sus exportaciones a Europa; en cambio, la Unión Europea puede buscar otros sitios donde comprar y otros países en los que invertir. Ambos no desean contemplar un escenario de conflicto comercial, pues saben que todos perderían.

José Ramón Pin, profesor del IESE Business School, afirma que “nos necesitamos unos a otros. Rusia ha sido siempre parte de la estructura geopolítica europea” e Ignacio Cantos, experto financiero, señala que "la Unión Europea pretende dejar el problema en algo más local, que no afecte a esta incipiente recuperación".

En cuanto a los intereses nacionales directos, 3.000 empresas españolas trabajan en Rusia y la mayor amenaza se centraría para el sector turístico. Ángel Pascual, profesor de ESADE, dice que un coflicto entre ambos lados "puede tener un impacto muy real en la economía, vía sectores que para nosotros son importantes como el turismo y la compra de propiedades".

Los expertos afirman que para la hostelería, el turismo ruso, sobre todo por la noche, supone un 60% del personal y un 80% de la recaudación. Por tal razón, dificultar los visados a los turistas rusos no sería una medida apropiada, pues sin visado nadie vendría a España.

El turista ruso es uno de los que más gasta en España, por encima del alemán; dejándo aproximadamente 120 euros diarios de media.