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Capítulo 5: Dinero público
Carlos se ha negado a dejar la casa y Claudia sabe que en cualquier momento puede volver a suceder lo inevitable. Ester, ajena a todo lo que está sucediendo entre ellos, no entiende los cambios de actitud de su novio que, sin pretenderlo, la empuja cada vez más a refugiarse en Roberto. Éste acaba ofreciendo a Ester que trabaje para él.
La mujer del embajador registra el despacho de Bernardo, el cónsul, en busca de información. Carlos y Ester hacen un descubrimiento entre sus archivos que puede ser la pista esencial para probar la corrupción de la embajada.
El suicidio de Bernardo causa profunda conmoción. Luis viaja a Madrid, donde prácticamente lo consideran responsable. Por su parte, Eduardo se ve afectado por haber sido testigo del trágico suceso, cuyas imágenes le persiguen día y noche.
En Madrid, Luis se cita con Verónica, un alto cargo del Ministerio que parece la única capaz de ayudarle. Se lo oculta a Claudia: Verónica es la mujer que estuvo a punto de terminar con su matrimonio.
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El hackeo fallido de Goyito y la protesta de Alicia enseñando las tetas echan por tierra la negociación de Gregorio
“Es un mensaje completamente difamatorio”, recalca la letrada antes de comunicarle a Gregorio que van a hacer una excepción porque lleva toda la vida trabajando en el banco.
Gregorio, en shock al descubrir que va a ser abuelo: “¿Que me vais a meter en casa a un inmigrante y comunista?”
Alicia le cuenta que Pablo y Carlos van a ser padres y Sandra adelanta que van a adoptar a un niño en Rusia.
