Pepa informa a Olmo de que Águeda ha muerto. Olmo está destrozado con la muerte de su madre. Soledad se siente confusa, pero de todos modos le da su apoyo en estos momentos difíciles.
Olmo cuenta a la Guardia Civil que se fue de la fiesta antes de que su madre falleciera. Pero, fingiendo querer ayudar a la autoridad, insinúa sutilmente que Pepa pudo tener algo que ver con la muerte de Águeda.
Tras el entierro, Pepa mantiene el tipo delante de Tristán, pero acaba derrumbándose con el cura, se siente más sola que nunca.
Alfonso confía en que Pepa les ayude con la posible pérdida de la casa de comidas y trata de que Emilia haga las paces con su padre, destrozado tras la muerte de su prometida. Pepa pide ayuda económica para Emilia pero Olmo le explica que todavía no puede disponer del dinero de su herencia.
Mientras tanto la Guardia Civil ya tiene su veredicto sobre la muerte de Águeda…