¿Funciona el bótox como tratamiento para la hiperhidrosis?

Los pacientes con hiperhidrosis severa relatan en la consulta cómo actos cotidianos pueden ser muy dificultosos para ellos, por ejemplo, estrechar la mano con otra persona, elegir el calzado, limitar las prendas de vestir evitando colores y tejidos que marquen la sudoración y además tener que llevar consigo, en muchas ocasiones, una muda para cambiarse, entre otros aspectos que afectan las relaciones interpersonales y laborales de estos pacientes.

De hecho, la personas con hiperhidrosis en ocasiones evitan exponerse a situaciones con amigos y familiares o rechazan oportunidades laborales para evitar las situaciones comentadas.

¿Qué es la hiperhidrosis?

El sudor es un mecanismo fisiológico en respuesta al aumento de la temperatura corporal y a estímulos emocionales. Las encargadas de producir el sudor son las glándulas sudoríparas y se distribuyen por todo el cuerpo, sin embargo, predominan en la cabeza, en las palmas, en las plantas, en la espalda, en las axilas y en la zona inguinal.

Estas glándulas se activan de forma involuntaria reguladas por el sistema nervioso autónomo simpático, que es el que se activa de forma "automática" ante estímulos como la temperatura corporal elevada (clima cálido y húmedo, fiebre, etc.), el ejercicio físico (vasodilatación y aumento de la temperatura) o las emociones intensas (miedo, nerviosismo, ansiedad o vergüenza). Cuando la sudoración se produce de forma excesiva la denominamos hiperhidrosis.

La hiperhidrosis puede ser primaria o secundaria a ciertas enfermedades o cambios en el organismo. En la mayoría de los casos aparece de forma primaria sin causa conocida o identificable, a lo que llamamos los médicos causa idiopática. Esta puede ser focal o generalizada. La forma más frecuente de hiperhidrosis es la focal primaria.

Tratamientos contra la hiperhidrosis: ¿Funciona el bótox?

Para este tipo de hiperhidrosis uno de los tratamientos más efectivos es la toxina botulínica (bótox).

El bótox actúa bloqueando de manera transitoria y reversible la inervación simpática que regula a las glándulas sudoríparas. Puede emplearse en diferentes áreas como en las axilas, palmas y plantas, pero en estas últimas dos localizaciones mencionadas tiene un efecto y tiempo de duración muy variable.

Sin embargo, para la hiperhidrosis axilar es uno de nuestros tratamientos preferidos, con una alta satisfacción para los/as pacientes ya que a pesar de tener un coste elevado (es necesaria el doble de la dosis empleada para las arrugas de expresión) suele durar entre 8-12 meses y además de eliminar la sudoración elimina también la bromohidrosis o mal olor que algunas personas presentan en la zona axilar.

Otra ventaja es que es un tratamiento muy seguro, indoloro y sin molestias para el paciente, y que además puede realizarse en la consulta de forma ambulatoria. Los resultados suelen observarse a los pocos días de la aplicación del botox. Por todos estos motivos es uno de los tratamientos más recomendados hoy en día para la hiperhidrosis axilar severa.

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