Cómo limpiar una alfombra en casa: este el método más barato y eficaz

El gran problema de tener una alfombra en casa es que suele ser un foco de suciedad debido al polvo que acumulan y porque es un elemento que está diseñado para que se pise. Por lo tanto es importante prestarle atención al mantenimiento y limpieza de la alfombra.

Dependiendo de la alfombra quizá tengas que recurrir a ayuda de algún profesional, pero por lo general no debería hacer falta. El cuidado básico de las alfombras suele mantenerse con barrerlas y aspirarlas, sin embargo, si queremos darle un plus e higienizarla tan solo tendremos que aplicar bicarbonato de sodio

Lo primero que debemos hacer es aspirarla para quitar los restos de suciedad superficiales. A continuación, esparce una capa de bicarbonato por la zona que queramos limpiar. Hay que cubrir especialmente las manchas que tenga. Si añadimos un poco de sal la limpieza será más efectiva.

Una vez esparcido, debemos mojar el bicarbonato para activarlo. Para ello, podremos usar un pulverizador con agua caliente, ya que no es recomendable usar mucha agua, solo necesitamos humedecer la zona cubierta con bicarbonato para que reaccione. A continuación solo habrá que frotar y dejarlo repasar al menos durante una hora, sin embargo, cuanto más tiempo lo dejemos, más efecto habrá.

Tras dejarlo reposar, el bicarbonato se habrá secado. Por lo que el paso final será aspirar de nuevo la alfombra a conciencia para quitar los restos de bicarbonato que hayan quedado. Ahora la alfombra estará limpia y sin olores. Es recomendable hacer esta limpieza a fondo al menos una vez al año.

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