Jeremi, de nueve años, fue uno de los primeros pacientes de coronavirus en el Instituto Nacional de Salud Infantil de Perú que logró ver a su madre en una videollamada después de largos días de espera e incertidumbre. Su madre, Marjorie Flores Godinez, contuvo las lágrimas cuando le dijo a su hijo que lo amaba. Jeremi respondió mostrándole un dibujo de su personaje de dibujos animados favorito, Goku.
En Perú ya son casi 100.000 los casos confirmados por coronavirus y los 2.900 fallecidos desde que comenzó la pandemia, por lo que los hospitales prohibieron las visitas a pacientes de coronavirus, incluso a los padres de niños contagiados.
Por ello, desde el Instituto Nacional de Salud Infantil propusieron realizar videollamadas para los pacientes más pequeños, una medida que ha permitido que muchas familias sientan cierto alivio al ver la situación en la que se encuentran sus hijos.
A estas videollamadas se las conoce como "llamadas de alegría" y son realizadas por el personal de enfermería del hospital permitiendo un acercamiento entre padres e hijos contagiados por coronavirus.
Este tipo de acercamiento entre familias debido al coronavirus se está utilizando cada vez en más países como el de un hijo a su padre donde le anima a seguir luchando.
