Gatos
Una gata se cuela en una caja de mensajería y sobrevive 6 días encerrada: fue trasladada de Utah a California
La gata, de nombre Galena, se coló en un paquete que su propietario iba a devolver a una empresa mensajería. El dueño no se percató y la mascota emprendió un viaje de seis días.
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El matrimonio Clark, de Lehi, en el estado de Utah, dio la voz de alarma: su gataGalena, de seis años, había desaparecido. En su búsqueda recorrieron el vecindario, empapelaron las calles con fotografía de Galena pidiendo información, también utilizaron redes sociales como Facebook.
Tras una semana, cuando ya prácticamente la daban por perdida, Carrie Clark recibió un mensaje que, según ella, le "cambió la vida": el microchip de su gata había sido escaneado. Eso significaba que Galena estaba localizada. Horas después, una llamada de teléfono le ratificó que Galena estaba viva y en buenas manos. Había aparecido en un almacén de la empresa Amazon en Riverside, California, a unos 1.000 kilómetros de su casa.
La gata se metió en la caja de botas que su dueño iba a devolver
Todo empezó cuando el señor Clark, que había comprado varios pares de botas a través de Amazon, decidió quedarse sólo con uno y devolver los demás pares. Los puso en una caja y envió el paquete, si percatarse de que Galena, muy aficionada a jugar con cajas según su dueña, se había metido dentro.
Tras seis días, un empleado de un almacén de Amazon abrió la caja y se encontró con una gata. Rápidamente se dirigió a su compañera Brandy Hunter. Sabía que se dedicaba a recoger gatos abandonados o perdidos. Hunter la llevó al veterinario, que escaneó su microchip y le diagnosticó una leve deshidratación.
Sobrevivió a seis días sin comer ni beber
Obviamente, Galena había pasado seis días sin comer ni beber. Según el veterinario, Galena sobrevivió porque el paquete no era del todo hermético, lo que le permitió respirar sin dificultad, y porque las temperaturas fueron bastante suaves durante su cautiverio.
Tras recibir la feliz llamada, los propietarios de la gata fueron a por ella y la trajeron de vuelta a casa. Carrie Clark está ahora difundiendo su historia con dos objetivos: concienciar a los propietarios de mascotas de lo importante que es que lleven un microchip identificativo y también recordar que, antes de cerrar un paquete que pretendamos enviar, conviene cerciorarse de que no se cuela nadie que no deba.
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