Sube la temperatura entre Marta y Fina en el cuarto de revelado: “Nadie me ve como me ven tus ojos”

Después de la emoción, el cuarto de revelado se ha transformado en un espacio mucho más íntimo. Fina ha encendido las luces rojas y, con una mezcla de ternura y picardía, ha mirado a Marta: “No te puedes imaginar las ganas que tengo de estar aquí juntas y solas”. Marta con una sonrisa de oreja a oreja, ha respondido: “Ah, ¿sí?”. Fina sin titubeos ha asentido: “Tengo tantas ganas de fotografiarte…”.

Las palabras se han ido transformando en gestos y caricias que han acabado con besos eternos. “Nadie te ve a través de mis ojos” ha murmurado Fina. “¿Y qué ven tus ojos?”, ha preguntado Marta seguido. La respuesta ha sido simple como poderosa: “A la mujer de mi vida”. En ese instante, ambas se han empezado a desvestir con una conexión que traspasaba lo físico.