Jesús, cada día más cansado de Mercedes: “Cierre la maldita boca”

Desde que Mercedes llegó a la casa de los De la Reina, por fin parecía que los ataques habían disminuido. Sin duda el estar al lado de su hija calmaba a la enferma anciana. Pero las apariencias engañan: los nervios cada día se apoderan de la mujer de manera más frecuente, y no parece haber una solución a ellos.

Jesús cada día los soportamenos: lo que al principio parecía que le iba a acercar más a su mujer, ha terminado resultando un problema más en su relación.

Mientras Julia pasaba un entrañable momento junto con su abuela, el mayor de los hermanos De la Reina ha interrumpido pidiéndola que fuese a prepararse para ir al cole.

Cuando la joven se ha ido, la mujer ha entrado en cólera: “¡No es tu hija es la mía!”, ha gritado presa de los nervios, enzarzándose con Jesús en una lucha.

“Cierre la maldita boca”, ha sentenciado el hombre antes de pedirle a una de las amas de casa que fuese en búsqueda de Begoña. Si estos ataques continúan, ¿seguirá Mercedes mucho más tiempo en la casa?