ACOGIDAS

Requisitos para adoptar a un perro de una protectora

Adoptar a una mascota de un refugio es un gesto noble y humano, que nos será recompensado con creces por parte de nuestro nuevo amigo peludo, pero debemos ser conscientes que suelen requerir más cuidados y atenciones al principio.

Un pastor alemán en una protectora de animales.

Un pastor alemán en una protectora de animales.Pexels.

Publicidad

STORIES

Cuando nos planteamos introducir un nuevo miembro canino en nuestra familia, una de las opciones más agradecidas es adoptar un animal que se encuentra en alguna casa de acogida o protectora.

Una vez que nos aventuramos en ese mundo, debemos saber que requisitos nos van a pedir y que características presentan estas mascotas.

Requisitos para adoptar a un perro de una protectora

Dentro de las protectoras hay que distinguir entre los centros públicos o albergues y las asociaciones privadas.

En los centros públicos los requisitos para adoptar animales son los establecidos por ley, en los que se garantiza que el animal tendrá cubiertas todas sus necesidades y el riesgo de que vuelva a ser abandonado se intenta reducir a cero.

En estos centros es obligatorio adoptar a los animales tras pasar un examen exhaustivo y con la identificación, esterilización y vacunación al día.

Los centros privados, cada vez intenta cumplir más estas exigencias pero no siempre cuentan con el espacio o el presupuesto necesario para poder gestionar todas las necesidades, por lo que suelen tener colaboración de voluntarios que prestan su casa como hogar provisional a esas mascotas: las casas de acogida.

Todas las asociaciones hacen firmar igualmente un contrato de adopción en el que el nuevo propietario se compromete a esterilizar al animal y declara bajo firma que cumplirá con las necesidades sanitarias y de bienestar del animal.

Aunque estas asociaciones intentan que los animales salgan de sus instalaciones en las mismas condiciones que en las protectoras, no siempre es posible ya que muchas veces los animales se adoptan a una edad muy temprana para poder ser esterilizados.

¿Por qué me obligan a castrar a mi perro adoptado?

Esta pregunta la escuchamos en numerosas ocasiones. Al ser un perro recogido de la calle, con la esterilización nos aseguramos de que no se cruzará más veces, creando más cachorros mestizos que no siempre encuentran un nuevo hogar y son candidatos a terminar vagabundeando.

Como ya hemos comentado en muchas ocasiones, la esterilización no solo no es dañina para nuestras mascotas, sino que tiene numerosos beneficiosos a corto y largo plazo, por lo que no debemos verlo como algo negativo.

¿Cuándo paso a ser el propietario oficial de mi mascota adoptada?

Este es otro detalle que resulta difícil de entender. Todo animal debe estar registrado con un numero de microchip antes de los 3 meses de manera obligatoria. Cuando se adopta un animal, este suele estar ya identificado y dicho microchip suele estar a nombre de la protectora o de la asociación.

Como medida para asegurar la esterilización de la mascota, suelen imponer como requisito para realizar el cambio de propiedad, el informe de dicha intervención. Esto significa que, si adoptamos un cachorro con 3 meses, aun viviendo en nuestra casa durante 4 meses, no pasara a nuestro nombre hasta los 7 meses, cuando se pueda realizar dicha intervención.

Otros requisitos de las protectoras de animales

Aunque es indudable la desinteresada labor que realizan tanto las protectoras como las asociaciones, por desgracia siempre hay quien intenta hacer negocio con todo y empaña el carácter solidario de estas fundaciones.

Hay que tener cuidado cuando al recoger a nuestro peludo amigo nos hacen firmar mil y un papeles. Es indudable que debemos asegurar que nuestro nuevo amigo viva feliz, cuidado, con la compañía de su familia, bien alimentado, y con los cuidados veterinarios necesarios, pero no pueden obligarnos a comprar una marca de pienso en concreto, acudir a un centro veterinario determinado o vendernos mil y un complementos alimenticios o juguetes.

Estas practicas hacen que la esencia real de un centro de recogida quede enmascarada y las protectoras pasen a ser vistas como un negocio.

Adoptar a una mascota de un refugio es un gesto noble y humano, que nos será recompensado con creces por parte de nuestro nuevo amigo peludo, pero debemos ser conscientes que suelen requerir más cuidados y atenciones al principio, para superar los traumas del pasado, adaptarse a la vida en familia y recuperarse de enfermedades o carencia que seguro arrastra de su vida anterior.

Las familias que acuden a las asociaciones nos siempre son conscientes de estas necesidades y creen que ir allí es fácil adquirir un animal gratis para satisfacer el capricho momentáneo del niño.

Es por estas situaciones por las que se realizan estudios tan exhaustivos de la futura familia y se obliga a firmar contratos de responsabilidad.

La labor de estos centros es fundamental para ofrecer un futuro a esos animales que no han tenido la suerte de tener una familia que les cuide, garantizar que no haya animales vagabundos por las calles y por ende, que se minimicen las enfermedades asociadas a esas colonias callejeras.

Entre todos podemos conseguir un futuro mejor para nuestros animales, ya sea adoptando o evitando que los animales acaben en la calle buscándose la vida.

Novamas» Vida

Publicidad